8. LA PRIMA.

POV. DAMIAN.

Mis ojos estaban abiertos de par en par, nuevamente esa voz de mando, ese tono fuerte y sus ojos cambiando de color. Vi como Ethan y Nina se inclinaban incomodos, pero no adoloridos.

Pero Charlie parecía no notar nada.

Realmente ella no se daba cuenta del poder que ejercía en los demás con solo un pequeño cambio de actitud.

Sin embargo y a pesar de eso, mi atención se centro en sus palabras, duras, frías y certeras.

—De acuerdo, acepto. Te acepto como mi compañero. Si tu me necesitas como compañera solo por los beneficios que eso trae, entonces yo te acepto como compañero por la misma razón, te voy a usar para lo que necesito y prometo no molestarte. Quiero dormir en mi propia habitación, puedes usar a otras lobas para complacerte y solo estaremos juntos cuando lleguen nuestros celos. No voy a ser un estrobo en tu camino y espero que tu no lo seas en el mío.

Gruñí adolorido, pero mantuve mi rostro inexpresivo, porque además tenía unas horrorosas y ridículas ganas de llorar con cada palabras que acababa de decir.

Así que por eso me sentí mal antes, porque ella me escucho hablar, ella escucho que la quiero como mi compañera solo para mi beneficio y por eso me dolía el pecho y sentía que el aire no llegaba a mis pulmones.

Estire mi mano y afirme con mi cabeza.

—De acuerdo, es un trato. Serás la Luna, mi compañera y...

—Y nada más que eso —tomo mi mano y ambos sentimos las chispas, esa electricidad reconfortante y quería abrazarla, besarla.

Pero me mantuve tan firme que dolió de nuevo.

—Solo por esta noche dormirás en mi habitación, no quiero molestar a los Omegas tan tarde.

—Puedo hacerlo en el sofá.

—Ese no es lugar para dormir.

—No necesito falsas pretensiones o que intentes preocuparte por mí, cuando no lo haces —Kian gruñía en mi mente, estaba molesto.

"La estás lastimando. Es nuestra compañera, no merece esto" —dijo con rabia.

"No voy a cambiar mis planes solo por ella".

"Planes, planes, planes. Solo hablas de tus malditos planes, porque solo piensas en ti" —escupió y me bloqueo.

Charlie llego a la puerta de la oficina para marcharse y dejarnos solos, pero antes de abrir la puerta se giro hacia Ethan.

—Se que no te agrado porque soy renegada, pero somos buenos, honestos y trabajadores, no le hacemos daños a nadie.

Se marcho sin decir nada más y nos quedamos en silencio. Luego de unos minutos, Nina hablo.

—Sí, definitivamente esa chica me agrada, tiene más huevos que ustedes dos juntos —se puso de pie, pero Ethan la detuvo.

—¿A dónde vas?

—A hablar con ella, por supuesto. Esta sola, hasta donde sabemos no tiene familia, acaba de pasar su celo con su compañero, pero su compañero es un idiota que le dijo en su cara que solo la va a usar. Creo que la esta pasando mal y no merece estar sola, en lo que a mi respecta, la tomaré como mi Luna y le brindare el respeto y apoyo que merece.

Nina salió con la mirada en alto, la actitud arrogante y furiosa.

—Tiene razón —dijo Ethan en un susurró.

—No me interesa, estoy cumpliendo con los designios de la Diosa Luna, la tomaré como mi compañera.

—Damián, un compañero destinado es mucho más que solo sentirse más fuerte, más rápido o mejor. Es...

—No me interesa —lo interrumpí antes de que me diera un discurso sobre lo que ya sabía.

Sí, no la quería como compañera, porque no quería una compañera, pero sabía lo que era tener una, lo había sentido, solo tocarla era un despertar físico y emocional, pero no podía perder el enfoque.

Ethan se marcho luego de unos minutos, estaba por irme a mi habitación, pero el doctor de la manada me llamo.

—Rey —saludo tan formal como siempre.

—Derick —respondí igual de formal.

—Lo que encontré es extraño.

—¿Qué sucede?

—¿Estás seguro que la chica no tiene manada?

—Sí, al menos eso es lo que sé.

—Bueno, sería bueno que averigües de donde viene, quienes son sus padres, su familia, su origen.

—¿Qué no me estás diciendo?

—Hice un par de llamadas, investigue en la biblioteca y me contacte con uno de los ancianos —gruñí—. Sí, se que ellos no te agradan, pero a veces tenemos que recurrir a ellos.

—¿Y? —la ansiedad me estaba carcomiendo.

—Todo apunta que solo los hombres lobo con sangre de Alfa corriendo por sus venas pueden experimentar esos síntomas.

Todo se quedo en silencio. Apreté mis labios en una delgada línea y me quede pensando.

—Damián, tienes que investigar. No sabes quien es tu Luna.

Colgué sin despedirme y di grandes pasos hasta el pasillo de las habitación, empuje la puerta de la mía y todo estaba oscuro, encendí una de las lamparas de las mesas auxiliares y la cama estaba vacía, mis ojos fueron directo al sofá y allí estaba, acurrucada, abrazada a una almohada y con su perfecta melena derramada por todas partes.

—¿Quién eres, Charlie? ¿De dónde vienes?

La tome entre mis brazos para llevarla a la cama y cuando la termine de arropar un guerrero me enlazo.

"Rey Alfa, no quiero molestar, pero una chica en la frontera exige ver a su prima"

"¿Y qué puedo hacer yo? Llévenla con quien sea que quiere ver"

"Dice que esta en el castillo y que no se ira sin verla"

Mire a Charlie que dormía plácidamente, después de todo tiene familia.

¿Por qué mentiría?

Bueno, en realidad no ha mentido, porque no ha contado nada en absoluto. Y yo tampoco he preguntado, pero tal vez no tenga que preguntar tanto si su prima me cuenta lo que necesito saber.

"Déjenla pasar, pero no la dejen sola, quiero a dos guardias custodiándola"

"Sí, Alfa"

Mientras tanto organice en el castillo las cosas para que un Omega preparará una habitación de huéspedes y la recibiera.

Por ahora solo quería dormir y resolver lo que había pasado en la pequeña aldea de renegados, el ataque había sido demasiado cerca a mi manada y eso en definitiva era un problema. Me desnude y estaba por meterme en la cama cuando recordé a Charlie y me di cuenta que ahora no estaba solo y no podía estar desnudo como solía hacerlo. Use un pantalón de chándal y me metí entre las sabanas, pero unos minutos después esa pequeña diablilla, con su perfecto olor se subió sobre mi cuerpo y dejo su cabeza sobre mi pecho.

Definitivamente iba a ser una noche muy larga.