Más recuerdos antes de dormir
Gracias, puede que al alba, a las tenues luces de la mañana, al despertar en mi ciudad tras una noche en vela en el cielo, al silencio de la casa temporalmente vacía, a la droga natural de la diferencia horaria, en aquel instante los recuerdos me transportaban a una muy temprana juventud, cuando se presentó la ocasión y cacé al vuelo la oportunidad de irme a vivir sola.
Con veintidós años, dejar Sicilia significaba adueñarme de mi libertad.
Me llamaron para asistir al curso para convertirme en azafata poco antes de conocerlo.
Él se encontraba pasando unas breves vacaciones en Taormina, un espléndido pueblo medieval en la provincia de Mesina que se erige sobre el azul golfo de Naxos; yo me hallaba en la misma playa, tumbada bajo el sol cerca de su sombrilla, el agu……
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