UNA CONEXION INEXPLICABLE

Prisionera de un Amor fragmento. —Hola, eres la señorita, Annika. —Un elegante caballero se detiene frente a ella.—Esa soy yo. —contesta con una amplia sonrisa.—Mucho gusto, fue fácil dar contigo. —se veían por primera vez, en esta cita a ciegas.—Ya veo, bueno, es extraño, no nos conocemos y aquí estamos queriendo tener una cita. —dijo ella sin pelos en la lengua.—Sí, es extraño, pero también emocionante, ¿no crees? —respondió él, tratando de aligerar el ambiente. Sus ojos se encontraron y ambos sonrieron, un poco incómodos pero dispuestos a darle una oportunidad a esta inusual situación.—Supongo que tienes razón. —admitió Annika, jugando con la servilleta que tenía en frente. —¿Y qué debemos hacer? ¿Realmente te quieres casar conmigo? Eso me dijo mi padre antes de que aceptara esta cita.—Sí, esa es la idea, espero estés de acuerdo, ya lo hablamos con tu padre y todo está predicho. —¿Cómo me has conocido? Esa parte no la entiendo y sobre todo ¿Por qué yo?