Katherine, de 23 años, antes de cumplir los 20 años, a punto de dejar atrás su adolescencia, se enamoró de un joven tres años mayor que ella, pero su relación con él terminó, rompiéndole así el corazón y dejando una herida en ella, una profunda. Ella cada vez que lo ve a él, en la misma urbanización en donde comenzó su historia de amor; no puede evitar que los recuerdos la golpeen en el pecho. Soltera y con más madurez que antes, Katherine conocerá a dos hombres muy interesantes y reconectará con otro. Katherine se verá tentada a estar con un hombre infiel, del que pensaba que estaba disponible. Quedará encantada con un hombre prohibido (con pareja), y se reencontrará con uno que tiene un pasado turbio. Y ni hablar del ex de Katherine, quien aparecerá como una sombra, rondándola. Ella cometerá errores, jugará con fuego con... Se acostará con… y se va a enamorar de… e intentará sacar por fin de su mente a… pero no será fácil, porque estos cuatro hombres están muy unidos, ya sea por vivir en la misma urbanización o cerca de, hasta por interactuar como amigos o por medio de negocios de índole laboral. ¿Y tú quieres saber con quién terminará Katherine? ¿Tal vez, con uno de sus bombones? O ¿capaz con su ex?
Alexia De León, Alex, como le dicen sus familiares y amigos, comenzará a trabajar en la prestigiosa universidad de Yale, y conocerá al guapísimo profesor Antonio Rodríguez, Tony. Lo que parece ser normal y común se convertirá en una pesadilla para ambos cuando descubran que son hermanos. Lo peor de todo es que se van a enterar después de haber cometido un acto prohibido entre personas que tienen lazos consanguíneos. Una historia de amor, que en segundos se convertirá en una muy desagradable pesadilla, pero la esperanza de despertarse y darse cuenta de que todo puedo haber sido eso, una pesadilla nada más, les dará fuerzas para descubrir si su amor es: ¿Prohibido?
Las personas deberían de aprender a respetar las huellas esotéricas o huellas energéticas. Cuántos lugares abandonados, infestados de energía acumulada, y no precisamente de energía buena, los convierten en centros médicos, iglesias, hoteles, restaurantes, etc. Todo se resume a una palabra: “dinero”. Cuántos edificios, como, por ejemplo, hospitales en donde muchas personas murieron, y estas quedan deambulando, después de muertos por todo el lugar. Viene un empresario y compra el sitio, un hospital, y lo convierte en un centro de rehabilitación para drogadictos, alcohólicos, gente que sufre de ansiedad y ha intentado acabar con su vida, como yo. No hay mucha información sobre el hospital, ahora centro de rehabilitación, ya que no tuvo mucha fama en su época, pero no hay que saber mucho, ya que el lugar habla por sí solo. Pronto habrá testimonios por Internet y en los periódicos locales, sobre todas las situaciones paranormales que suceden aquí adentro. Una historia digna de fantasmas y entes bajos, muy negativos y espeluznantes.
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